La naturaleza ha sido desde los tiempos
más remotos el principal sustentador de la vida, agasajando a animales y
primeros pobladores de la Tierra con todo lo necesario para su subsistencia, y
en ese amplio grupo podemos y debemos incluir a los antiguos pobladores de
nuestras islas. El aborigen canario se surtía de la naturaleza para sobrevivir, pero hasta que alcanzó los conocimientos necesarios que hiciera
posible la domesticación de animales y, también, a la aparición de la agricultura, la
presencia del hombre y la necesidad de alimento provocó la desaparición de
ciertas especies por extinción.
Rata
gigante de Gran Canaria y Tenerife
Tras
diversos estudios realizados, se ha podido conocer que la subsistencia de los aborígenes
canarios se basaba en la agricultura y en la ganadería exclusivamente, salvo en
el caso de Gran Canaria, en donde también se practicaban otras actividades como
la pesca, la caza, la recolección, etc.
Todo ello, como ya mencioné anteriormente, provocó un gran cambio en el
medio, incluso suponiendo, en algunas ocasiones, la extinción de algunas especies animales
como: el ratón del malpaís,
la pardela del malpaís, la codorniz canaria, la foca monje, la rata gigante de
Gran Canaria, el lagarto gigante y la rata gigante de Tenerife. Con respecto a la flora, también hay varias especies
que se han extinguido debido a diversas causas producidas por los aborígenes en
las islas (por ejemplo, por la utilización de sus maderas para usarla como
combustible) como: el
viñátigo, el madroño, el laurel o el palo blanco Picconia. Por otra parte, en el caso de Gran Canaria también se produjo
una erosión del suelo debido a las actividades que realizaban los aborígenes en zonas determinadas.
Por otro lado, también cabe destacar, que la posterior
invasión a las islas, por parte de los españoles en el siglo XV, supuso un
impacto aun mayor al entorno que el que había provocado los aborígenes, ya que
introdujeron en el hábitat, un tipo de fauna (por ejemplo: la cabra), de flora
(incluida las malas hiervas como la Malva parviflora) y de enfermedades impropias de esta región.
Viñátigo
En definitiva, y para concluir, decir que debido a los diversos descubrimientos que se han producido con respecto a este tema en las islas, se ha demostrado que, aunque fue la presencia de los
colonizadores la que provocó más cambios , en todos los sentidos, en el territorio insular, los aborígenes canarios provocaron un impacto más que considerable en las islas.
- Bibliografía -
El IMPACTO de
las actividades humanas sobre el medio ambiente de las isla Canarias durante la
prehistoria por Jacobo Morales Mateos, Amelia Rodríguez
Rodríguez, Verónica Alberto Barroso, M. Carmen Machado Yanes, Constantino
Criado Hernández en El Indiferente, Nº 19, Pág 72-81. 2007