viernes, 30 de diciembre de 2011

Lawrence Edward Grace Oates

Este personaje histórico, nació en Londres el 17 de marzo de 1880 y falleció en 1912 el mismo día de su cumpleaños, y será recordado por su intervención en la exploración del Polo Sur y sus últimas palabras <<I am just going outside and may be some time>>, que se traduce como <<voy a salir y puede que por algún tiempo>>.

Realizó el servicio militar durante la guerra de los bóers, conflictos que enfrentaban al Imperio Británico y a los colonos de origen neerlandes (holandeses).En 1910 solicita el ingreso en la expedición que llevaría a Robert Falcon Scott a conquistar el Polo Sur, Oates es seleccionado por su experiencia con caballos y su contribución a la financiación de la expedición polar. Scott lo selecciona además como uno de los cinco hombres que lo acompañarían en el tramo final de la expedición, lo cual lo haría partícipe de la conquista, conquista que se convertiría en silencio en una carrera con el noruego Roald Amundsen, aunque Scott lo desmentiría. Durante los primeros tramos de la expedición Oates se resintió de una antigua herida de guerra agravada por el escorbuto.

Oates se enfrentó varias veces a Scott por discrepancias en la forma de dirigir la expedición, de las cuales dejó constancia en su diario en las que dejó claro que no abandonaría porque se trataba de una expedición británica pero que a Scott no le importaba nada más que su gloria y no le importaba el resto.

En 1912 en el camino de regreso, tras la decepción vivida al ver que el noruego Amundsen se les había adelantado en la conquista del Polo Sur, la expedición dirigida por Scott se enfrentó a condiciones adversas  lo que provocó  la pérdida de Edgar Evans, el 17 de febrero de 1912, debido a heridas que no sanaban y a la congelación de sus articulaciones.

Oates se había convertido también en una carga para el grupo, debido a su herida que seguía empeorando, llegando a alcanzar un estado físico lamentable haciendo que la marcha del grupo se redujera considerablemente al negarse el grupo de dejarlo atrás. Finalmente Oates entendiendo que solamente lastraba al grupo, decidió salir de la caseta por la noche y alejarse del campamento para morir de hipotermia sobre la nieve, y así darles una oportunidad de sobrevivir, el 17 de marzo de 1912 el día de su 32º cumpleaños. Desgraciadamente su sacrificio llegó tarde, sus compañeros murieron a pocos kilómetros de un depósito de víveres. Irónicamente si Scott hubiera seguido los consejos de Oates se podrían haber salvado.

Una de las regiones de la Antártida fue nombrada como la Tierra de Oates en su honor  




















A continuación os pongo  una canción que narra parte de su historia y su trágico final. Espero que os guste.    
   

2 comentarios:

  1. Para mi es lo más la capacidad de sacrificio de Oates, para salvar al grupo, a sus compañeros. Su acto le Honra. Lástima que hoy en día hayan tan pocos Oates. Pero como no van a quedar pocos, si lo que nos está vendiendo la sociedad del bienestar y el consumo es la idea contraria a la necesidad de esfuerzo y sacrificio. Abogan por la comodidad y el confort y las pintan como que se pueden alcanzar sin trabajo. Esto produce la incapacidad de las personas dando lugar a consecuencias negativas para aquellos con sentimientos de impotencia y conformismo; el no valorar las cosa, la incapacidad de disfrutar de ellas y la falta de entusiasmo.
    Hay que fomentar la capacidad para afrontar las dificultades, que enseñen el valor del esfuerzo, la necesidad de una fuerza de voluntad fuerte, la capacidad de sacrificio.

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  2. En mi opinión, Oates, es un claro ejemplo de personas que encarnan esas características que tanto añoramos en estos días, como la honradez o la capacidad de sacrificio, y que sus acciones marcan el rumbo de la historia y que su único pago, es el destierro en el olvido solamente rescatado por las personas que deseamos saber más y que al descubrir personajes como Oates, no tenemos más remedio que rendirnos a ellas.

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